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La logística 4.0 implica automatizar procesos a través de tecnologías novedosas que conectan las máquinas con el capital humano. De esta forma, se logra disminuir fallas, tiempos y costos de producción. En logística se pueden implementar herramientas como la Inteligencia Artificial, Big data, Blockchain, IoT, robótica y automatización.
Alrededor del mundo ya son muchas las empresas que le han apostado a la Industria 4.0 como una alternativa para mejorar su competitividad. En logística, por ejemplo, la transformación digital trae como resultado mejores niveles de servicio y reducción de costos operativos.
A pesar de estos beneficios, su implementación también implica grandes retos organizacionales. Las empresas de la industria 4.0 deben transformar tanto su estrategia de negocios como su cultura organizacional. De esta forma, se logra vincular correctamente la transformación digital al propósito global de la compañía, impulsando todos los esfuerzos en una misma dirección.
Si bien la inversión en tecnología es el pilar de la Cuarta Revolución Industrial, no se puede dejar de lado un proceso clave de su implementación: la integración con las personas. El capital humano comienza a tomar cada vez más relevancia ante la necesidad de adoptar estas nuevas tecnologías.
Encontrar armonía entre la persona y la máquina en cada uno de los procesos debe ser el objetivo de una transformación digital exitosa. Para lograrlo las empresas deben planear y prever los cambios que trae consigo la implementación de nuevas tecnologías.
Para incursionar en la Logística 4.0 debemos buscar perfiles laborales que vayan más allá del conocimiento específico de un tema. Por esto es necesario capacitar a la fuerza laboral en competencias que no puedan ser emuladas por la tecnología y que permitan generar valor a través del uso de herramientas innovadoras.
Para el sector de la logística y transporte, las competencias más demandadas de cara a la Cuarta Revolución Industrial son: pensamiento computacional, competencias digitales, resolución de problemas, sentido común (relacionado a la capacidad de analizar y organizar datos), colaboración virtual y pensamiento interdisciplinario.
Actualmente, la logística ha tomado un papel protagónico al interior de las organizaciones, por lo que es indispensable contar con una mirada global de todas las áreas de la empresa. Esto se debe a que está presente de una u otra forma en todos los procesos internos, por lo que el entendimiento que esta área tenga de la realidad organizacional será clave para la toma de decisiones.
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En los últimos años se han venido presentando situaciones que han creado los escenarios ideales para el desarrollo del sector logístico gracias a las facilidades de conectividad que brindan las nuevas tecnologías. Esto trae consigo un aumento en la demanda laboral que representa el 6,4% del empleo en el mundo en 2020, según la Organización Internacional del Trabajo.
A pesar de encontrar un panorama global prometedor, la situación en Latinoamérica es muy diferente. La incorporación de estas nuevas tecnologías ha sido lenta y rezagada en la región, por lo que se espera que apenas en los próximos años se comiencen a evidenciar cambios en la demanda de capital humano.
Para la implementación de Logística 4.0 es necesario contar con colaboradores capacitados en el uso de TIC y análisis de datos, se estima que estas habilidades serán requeridas en más del 90% de los empleos futuros. Actualmente, muchas instituciones han creado o transformado su oferta educativa en función de las nuevas competencias demandadas por la industria. Sin embargo, estos cambios no van al mismo ritmo que los avances tecnológicos, principalmente en países en vía de desarrollo como Colombia.
Según el estudio sobre “Brechas de capital humano en el sector de logística 4.0 en Bogotá y Colombia” del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo –PNUD- y la Cámara de Comercio de Bogotá, en el país hay poca oferta para perfiles que apoyen el desarrollo estratégico de las organizaciones logísticas y contribuyan a la implementación de tecnologías 4.0. Esto también genera una mayor brecha salarial debido a la escasez de personal cualificado.
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El estudio presentado por el PNUD y la Cámara de Comercio de Bogotá, revisó el número de personas matriculadas entre 2014 y 2018 en programas relacionados con Logística y TIC. Con esto se evidenció un crecimiento promedio de 6,38% en las matrículas. Sin embargo, comparando este resultado con otras áreas del conocimiento, vemos que el número de estudiantes de carreras logísticas y de TIC representan la menor oferta de capital humano con un 5,3%.
La educación actualmente no está limitada a la oferta del sistema educativo convencional (Universidades, Institutos, Escuelas, etc). Actualmente, encontramos la tendencia de optar por educación alternativa que le permite a los profesionales actualizarse en aspectos puntuales de su profesión. Esto ayuda a responder con mayor facilidad a las nuevas demandas de la industria 4.0 sin necesidad de reformar un pénsum o iniciar una carrera profesional desde 0.
Sin embargo, la falta de capital humano no es el único problema del sector logístico. Su competitividad y efectividad a la hora de atraer y retener talento es muy inferior a otras áreas de conocimiento debido a menores salarios, pocas oportunidades y alta competencia con otros sectores.
Finalmente, es importante entender que la industria 4.0 ya está aquí y nos ofrece grandes oportunidades de crecimiento y competitividad, pero para lograrlo debemos construir una base sólida de colaboradores capaces de asumir los nuevos retos y cumplir nuevos roles dentro de la organización.
