Formación para empleados, una apuesta de los gremios para mejorar el sector logístico

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Defencarga, Camacol y ATC ya le salieron adelante a la formación para los empleados de diferentes eslabones de la cadena logística. Con ello, las agremiaciones buscan mejorar los procesos, agregar valor al capital humano y fomentar el sentido de pertenencia.

Una ‘Escuela de Destrezas Logísticas’ es la apuesta con la que Defencarga se une a las iniciativas de las agremiaciones para ofrecer programas de formación a los empleados de las empresas asociadas, en este caso, del sector de transportadores de carga.

La iniciativa que nace como una unión entre la academia, gracias a la Institución Universitaria Pascual Bravo; el sector público, gracias al Sena y la Alcaldía de Medellín; y el sector privado, gracias a las empresas asociadas a Defencarga, promete formar a conductores, líderes de logística, auxiliares de bodega y auxiliares de despacho.

La importancia de este tipo de programas radica en mejorar los niveles de formación del personal para aumentar así la efectividad y la competitividad. Según Clarita María García Rúa, directora ejecutiva de Defencarga, “tenemos alta necesidad de sector formado. En este momento la encuesta nacional logística dice que el 82% del personal de nuestras empresas está en niveles de escolaridad que no alcanzan siquiera el grado de bachillerato y nosotros aportamos al costo logístico casi un 90%”.

Para ella “es absolutamente necesario formar estas personas para incrementar la productividad de las empresas y disminuir así ese costo logístico, lo que nos permite, a su vez, ser más competitivos en los mercados internacionales”.

Frente a esto, Juan Camilo Ostos, Viceministro de Transporte, explicó que “desde el inicio de las operaciones en las zonas de cargue y descargue, un operario que tenga unas destrezas y unas competencias puntuales para realizar su actividad mejora la productividad de toda la empresa y mejora la eficiencia de los costos” agregando que, “estos esfuerzos de formación, de generar valor agregado en la cadena humana de la logística son completamente plausibles”.

La Asociación de Transportadores de Carga (ATC) ya cuenta con un programa de formación llamado ‘Profesionales en la ruta’, mientras que Camacol le apuesta a la formación de los obreros con las ‘Escuelas en la obra’ y, hasta ahora, este tipo de programas solo han demostrado que mejorar el nivel de formación de las personas que trabajan en la cadena logística se traduce en beneficios para las compañías, entre ellos, mayor eficiencia en los procesos, reducción de costos, reducción en la rotación de los empleados y aumento en la competitividad.

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