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Reconociendo el impacto de las industrias en el cambio climático, muchas compañías le han apostado a implementar una logística sostenible.
Una de las alternativas para dar el primer paso hacia la protección del medio ambiente es la logística. Sus procesos generan un gran impacto en la generación de gases de efecto invernadero y la generación de residuos.
Las principales tendencias que encontramos en el país son la renovación de flotas de transporte a vehículos eléctricos, el uso de energías renovables en centros de distribución y modelos de economía circular para optimizar materiales y recursos.
A continuación, te presentamos 8 compañías que apuestan por una logística sostenible a partir de la innovación, la tecnología y la colaboración.
Esta compañía dedicada a la fabricación de aceites y grasas ha implementado un modelo para reducir su huella de carbono en los procesos de almacenamiento. Para esto se han enfocado en aquellas variables que impactan directamente en el uso de recursos como: consumo de energía eléctrica, gas, plástico vinipel, corrugado, etc.
Igualmente, incorporaron un modelo de economía circular usando estibas ecológicas, 100% en plástico reciclado, para los procesos de almacenamiento. De esta forma, redujeron los costos de compra y mantenimiento de estibas en el CEDI. Asimismo, se pasó de usar montacargas de gas a eléctricos en las operaciones logísticas. Apoyados en la “Matriz de Sostenibilidad Logística”, se mide y controla el impacto ambiental de estos procesos.
La compañía ya ha comenzado a implementar el modelo en Bogotá y Barranquilla y se espera en los próximos años aplicarlo en todas las operaciones. Igualmente, esperan medir y controlar la huella de carbono en todos los procesos de la cadena logística. Esto se suma a la meta de alcanzar cero consumo de Vinipel en las operaciones de cara a tres años.
Novaventa ha implementado un proyecto de sostenibilidad basado en tres pilares: densificación operativa, distribución flexible con contenedores de temperatura controlada en reemplazo del icopor y economía circular del material corrugado.
Para evitar una ampliación del CEDI se optó por la densificación de la operación que implicó: implementación de sistemas de almacenamiento de pasillo estrecho, automatización del procesamiento de pedidos y líneas de picking en segundos niveles. De esta forma, se duplicaron los pedidos y unidades procesadas sin necesidad de crecer en metros cuadrados construidos, logrando en 5 años un incremento de unidades procesadas por metro cuadrado del 88%.
Además, han buscado alternativas para hacer entregas combinadas de todos los productos de su portafolio, incluyendo fríos y congelados. Para esto desarrollaron un algoritmo que optimiza el nivel de llenado de las cajas donde empacan los pedidos, lo que ha generado una disminución en el uso de cajas, vehículos a despachar y el espacio utilizado en el CEDI.
También desarrollaron 47 plataformas crossdocking para llegar a 780 municipios de Colombia, entregando tanto productos secos como refrigerados y congelados en una misma entrega, siendo la única compañía de venta directa a nivel mundial capaz de hacerlo.
Esto es posible gracias a un dispositivo móvil de conservación de productos con temperatura controlada, desarrollado en alianza con Indafre, Alimentos Cárnicos y Novaventa. De esta forma, reducimos en un 80% el uso de icopor en nuestra red de distribución.
La compañía cuenta con una robusta estrategia de sostenibilidad centrada en tres pilares: impulsar la cooperación; fomentar la preservación del planeta; y promover el crecimiento, desarrollo e innovación. Este modelo les otorgó el reconocimiento como la Compañía de alimentos más sostenible del mundo en 2021, según el índice de Sostenibilidad Global de Dow Jones.
Algunos de los resultados obtenidos con su estrategia para reducir el impacto ambiental se destacan:
La compañía inició el piloto del primer vehículo de carga pesada operado con hidrógeno en Colombia. Esta iniciativa es posible gracias a la alianza entre Solenium, Opex y Unergy, compañías que resaltan la innovación del proyecto y su aporte a la meta de cero emisiones.
Para el piloto fue necesario intervenir un camión al que se le instaló un sistema que mezcla el hidrógeno con diésel. De esta forma, lograron un funcionamiento más sostenible y una reducción superior al 10% del consumo durante un recorrido de más de 150 kilómetros por carga.
Este vehículo evitaría el consumo de 400 galones de diésel al año. La estrategia hace parte de la meta de alcanzar las cero emisiones netas de gases efecto invernadero en 2050 y se suma a la flota de 13 vehículos de bajas emisiones. A esta apuesta por la sostenibilidad se suman otros pilares como: el uso eficiente de los recursos, la promoción de la circularidad y la implementación de un portafolio de soluciones innovadoras con un mejor desempeño ambiental.
Ha unido esfuerzos para reducir las emisiones de CO2 y mejorar la calidad del aire a través de la implementación de una logística verde basada en el uso de energías renovables. Esto con el propósito de responder a la necesidad de comenzar a priorizar el cuidado de la vida y del planeta.
Hasta el momento han instalado 452 paneles solares en su sede principal, incorporaron 10 vehículos eléctricos y 3 a gas natural. De esta forma, se pretende reducir 257.629 toneladas de CO2 al año, equivalente a reforestar 11.424 árboles anualmente. La nueva flota de vehículos ya opera en ciudades como Bogotá, Medellín, Barranquilla, Cali, Pereira, Bucaramanga, Ibagué y Pasto.
Según la compañía, la implementación de esta tecnología no solo ha permitido mejorar su impacto ambiental, sino que también ha mostrado resultados en la eficiencia, productividad y costos.
A raíz de la pandemia y la crisis por la escasez de materias primas e insumos del sector automotriz, Sofasa se enfrentó a un gran reto para garantizar el abastecimiento. Debido a la fluctuación permanente de los precios y los incrementos de casi el 50% de sus materias primas, la compañía buscó alternativas para mantenerse en el mercado.
Basados en el modelo de economía circular se aliaron con BIG, proveedor de discos y campanas de freno, para reutilizar la chatarra que posteriormente se usaría en la fabricación de sus componentes. Esto representó un ahorro de 10,65% por pieza (2021).
Según la compañía, se entregaron 133 toneladas de chatarra al proveedor para la fabricación de piezas exclusivamente para SOFASA con este modelo de economía circular.
La compañía presentó una nueva flota conformada por vehículos 100% eléctricos y otros de bajas emisiones. Los primeros cuentan con una capacidad de 3,1 toneladas, mientras los segundos, que operan en las regionales de Barranquilla, Bogotá, Manizales, Pereira y Medellín, tienen una capacidad de 6,5 toneladas.
La inversión total de esta nueva flota fue de más de 6 mil millones de pesos, teniendo en cuenta que cada vehículo tiene un valor de 280 millones con carrocería incluida.
Con esta iniciativa TCC busca conocer de primera mano los costos reales de este tipo de vehículos y crear los criterios técnicos que permitan tomar mejores decisiones para la renovación de su flota.
Esta compañía ofrece el servicio de mensajería y transporte a través de vehículos amigables con el medio ambiente que son fabricados y diseñados por ellos mismos.
Una de sus premisas es lograr la sostenibilidad a medida que se brindan soluciones logísticas más eficientes. Con su propuesta de valor han logrado reducir 883 kg de CO2 en el primer trimestre de 2022 y 997 kg de CO2 en el segundo trimestre. Para 2025 Piot espera descarbonizar 41 toneladas de CO2, equivalente a 2 canchas de fútbol profesionales.
Actualmente, su modelo logístico ha evitado la emisión de 3.4 toneladas de CO2, ha repartido más de 20 mil paquetes en Bogotá con un porcentaje de entrega exitosa del 98%.
